Pollo 1
Cebolla 2
Chile dulce 1
Culantro fino 120 g
Ajo 2
Tomate 4
Consomé de pollo
Pimienta y sal
PREPARACIÓN
Partir el pollo entero en cuatro partes e introducir las piezas en una olla con agua.
Colocar al fuego y agregarle sal, pimienta y consomé de pollo. Picar en cuadros el tomate, la cebolla, el chile dulce y agregar a la olla junto con el ajo y el culantro fino.
Dejar cocinar todo hasta que el pollo se encuentre listo para retirarlo del fuego.
Retirar el pollo de la olla y dejar enfriar. El caldo servirá para la salsa. Desmenuzar el pollo.
En un sartén colocar margarina y dejar derretir, agregar el pollo desmenuzado.
Dejar sofreír el pollo, agregando nuevamente unas pizcas de consomé de pollo.
Cuando el pollo se encuentre casi listo, picar rajas de chile dulce y cebolla.
Añadir queso mozzarella o quesillo y dejar derretir.
La carne de pollo se encuentra lista.
La salsa: Las salsas constituyen el toque y el acompañamiento especial de cada platillo, y nada mejor que una salsa roja de tomate fresco. El caldo que quedó del pollo se pone al fuego, sin colar. Agregar la pasta de tomate y disolver bien, hasta que quede una mezcla homogénea.
Agregar pizcas de sal y pimienta, si es necesario.
Cocinar a fuego lento y agregar unas pizcas de azúcar, con el objetivo de dar un toque entre agrio y dulce a la salsa. Para dar el aunténtico sabor mexicano, se recomienda agregar chile líquido.
Se deja cocinar todo hasta que la salsa consiga una textura espesa.
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