jueves, 17 de octubre de 2013

Bicarbonato y cirios contra las molestas cebollas



Si detestas que las lágrimas broten por tus ojos cada vez que cortas una cebolla, intenta hacerlo bajo un chorrito de agua o ponte debajo de una campana extractora, si la tienes, recomiendan las abuelas.

¿Por qué arden los ojos? Este tubérculo contiene una molécula que se libera cuando lo cortamos, expulsando varios componentes. Uno es un gas de azufre que, al contacto con el agua (como en los ojos), produce ácido sulfúrico en pequeñas cantidades. Por eso arden.

Según Aleida Flores, de 71 años, se deben poner las cebollas en el refrigerador o en el congelador por unos minutos antes de pelarla. “Usar gafas de sol funciona, o colocar en la punta del cuchillo una bolita de miga de pan”, recomienda. Otra idea, aunque un poco incómoda, es cortarla dentro de una bolsa de plástico grande.

“Si son muchas las cebollas que debes picar, intenta ponerte bicarbonato alrededor de los ojos, humedeciendo antes tus párpados para que el polvo quede pegado”, agrega Flores.

Prueba también cortar el tubérculo dentro de una vasija con agua. “No funciona si quieres picarla muy fino porque el envase perjudica el movimiento del cuchillo”, advierte la awicha.

Vinagre o vino

Coloca un chorro de vinagre blanco o vino en un recipiente con agua tibia, quita la cáscara de la cebolla, pártela por la mitad y déjala en reposo unos minutos en este preparado a fin de eliminar su grado ácido. Luego estará lista para picar.

Acero inoxidable o cirios

Ponte una cucharita de acero inoxidable o una ramita de hierba en la boca mientras cortas. Por la humedad, el azufre se concentrará ahí. También puedes encender un cirio cerca de ti para que consuma el ácido.

Fuente: Aleida Flores.

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